Tomar infusiones es uno de los hábitos más saludables conocido desde antaño, y así lo llevan demostrando siglos las culturas Inglesa, Árabe o China, con sus tés. Pero además, la mayoría de nosotros hemos visto como nuestros abuelos o nuestros padres, han hecho y tomado infusiones como remedio a casi cualquier "malura": infecciones (tomillo), resfriados (eucalipto), dolor de estómago (manzanilla), gases (anis estrellado),...

Hoy en día, tomar infusiones, se sigue recomendando no sólo para mejorar determinadas molestias, sino como forma saludable de ingerir líquidos y prevenir ciertas patologías.

¡Buen provecho!